Si eres creador/a en Aixeta, puedes crear varios niveles de suscripción para que tu público tenga diferentes combinaciones de dinero y recompensas de que elegir para apoyarte. En cada nivel de subscripción, defines las obras que esperas crear y poder compartir con tus mecenas y la cantidad de euros que tendrán que pagar mensualmente para tener acceso a estas obras. Puedes definir tantos niveles de suscripción como quieras y pueden ser por la cantidad de dinero y las recompensas que quieras. Lo mejor es que éstas sean concretas y que reflejen lo que aprecian tus seguidores.

Hay diferentes modelos o sistemas de recompensas que puedes utilizar:

Crear una biblioteca de contenidos

Hay muchas maneras de ofrecer contenidos para atraer suscripciones. Puedes utilizar tu página a Aixeta como una biblioteca de todos tus contenidos, tanto de las cosas nuevas como de las viejas que tus mecenas todavía no conocen.
   
O puedes usar tu página en Aixeta para ofrecer contenidos más largos, completos, detallados o trabajados, mientras ofreces una muestra o versión reducida en abierto o a un nivel más bajo de suscripción. Por ejemplo, si normalmente haces un audio en que explicas los diferentes idiomas del mundo, entonces puedes ofrecer una versión más completa de media hora para los suscriptores. O una versión con vídeo. O una guía para los maestros para que facilitar su uso en la clase.
   
También son populares los contenidos ofrecidos en primicia. Primero das acceso inmediato a los suscriptores y unos días más tarde, ponen el mismo contenido al alcance de todo el mundo.

Crear comunidad
Tu página en Aixeta puede ser un eje de actividad comunitaria, de activismo, de proyectos de barrio o de otra cosa compartida. Las recompensas pueden ser encuentros con la comunidad, preguntas y respuestas sobre el tema que os une, artículos, etc. La clave es crear una comunidad de personas interesadas en el mismo tema.

Compartir conocimiento
Puedes ofrecer tu pericia, tu experiencia en la creación a tus mecenas. Quizás sabes hacer ganchillo, jardinería, murales, cuadros, páginas web, tocar la guitarra o hablar danés, quizás sabes la historia de Cataluña o el mejor sitio para hacer surf durante el invierno. En Aixeta puedes ofrecer tu conocimiento. Puedes poner lecciones cortas abiertas a todo el mundo y lecciones más extensas sólo para suscriptores. Puedes ofrecer tutoriales que explican las técnicas más complicadas, puedes explicar consejos y detalles por escritor, por audio y por vídeo. Tu página en Aixeta puede ser un buen recurso para quien quiera aprender lo que tú ya sabes.

Ofrecer una relación con tus suscriptores
Puedes aprovechar tu página en Aixeta para crear una conexión personal con tus mecenas. Puedes darles acceso a tú mismo/a, dejando que te hagan preguntas sobre las cosas que crees, puedes reconocerlos públicamente con agradecimientos, puedes compartir tu vida detrás del escenario (tu proceso creativo, tu vida personal, tu visión del mundo), puedes tener conversaciones virtuales individualmente o en grupo (un club de lectura virtual o en persona, asistencia a ensayos, una cena o ir a tomar un café), puedes ofrecer mensajes personalizados (enviar postales o conectarse por las redes) y mucho más.

Suscripciones con precios variables
Otra opción es dejar todo el contenido en abierto o disponible para el nivel más bajo de suscripción y luego crear múltiples niveles de suscripción con las mismas recompensas a diferentes precios para que los suscriptores puedan elegir el nivel al qual te quieren apoyar.   

Servicio/producto
Puedes usar Aixeta para ofrecer un producto o servicio, una llamada mensual, consejos de negocios, clases individuales o en grupo.

Sorpresas
Otra posibilidad es ofrecer contenidos sorpresa—cosas personales o aleatorias—cosas que no son parte de ninguna otra recompensa, ni son regulares, pero que despiertan la curiosidad de un suscriptor potencial.

Esperamos que estas ideas te ayuden a pensar en las recompensas que quieres ofrecer. Lo más importante es que conozcas tu público, lo que valora y lo que quieren de ti y que publiques con ciertas regularidad. La única limitación es tu imaginación. ¡Nos vemos en Aixeta!